Comparto el mail de respuesta a la ingeniosa pregunta que me hizo Felipe. Esto fue en verano, su inquietud surgió en junio, pero mi contestación tuvo lugar un mes después, recién llegada del curso de verano de técnica e interpretación.
¿Es la actriz un dj de textos y emociones?
"Nunca es tarde si la dicha es buena, y además si ahora puedo contestarte mejor que hace un mes.
Respondiendo a tu símil de los actores y los djs, genial como siempre, te contesto que sí. Ahora vienen los matices, espero no ser muy críptica.
El texto es una herramienta fundamental para el trabajo de una actriz, el dramaturgo ha escrito la obra de aquélla manera y solo así es válida. Nada es casual, todo tiene su por qué (esta pregunta, el por qué es la más importante en el trabajo de una actriz). Da igual que luego hagamos versiones de esa obra, o que incluso hagamos una apuesta experimental de un texto de Lope de vega, el texto permanece y los cambios son fruto de las adaptaciones.
Hay que desentrañar el texto, desmenuzarlo, desguazarlo, buscar la esencia y todas las respuestas a las preguntas que nos puedan surgir. Si me permites que siga con el símil, hay que loopear y scratchear cuantas veces sea necesario las palabras del autor o autora.
Las emociones. Aunque pueda parecer lo contrario la actriz necesita control. De nada sirve una emoción descontrolada, porque puede desembocar en otra cosa que no queremos en ese momento. Todo es concentración y control, para estas cosas sirve la técnica para no salir a escena controlando, si no controlar mecánicamente, por inercia, porque ya has aprendido la conducta. Cuando vas al trabajo no piensas que calle es la que tienes que tomar a la vuelta de la esquina, lo haces sin pensar, incluso puedes ir escuchando música, comiendo, concentrado en otras cosas, porque tus pies (más bien tu cerebro) te llevarán a la oficina.
Aún así las emociones son maravillosas, pueden desaparecer y también regresar con más fuerza. Pero en esta sesión de dj hay un elemento principal que falta: LA ACCIÓN. La acción es lo más importante de la escena. Si hay emoción pero no hay acción, no se consigue, no hay conflicto. Ya que esto va de símiles, te ofrezco uno bastante horroroso de mi profesor de técnica del curso de verano: "la acción es la novia, la emoción es la dama de honor". Es estupendo que nos emocionemos, sin que eso pese más que la propia acción, que es por lo que estamos aquí."
1 comentario:
Qué buena respuesta coño!
Muak!
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